Bélgica Vs. Brasil por semis, Clásico Mundial

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Como los caballos de pura sangre la Selección de Bélgica perdía 2-0 y terminó ganando 3-2 en un álgido encuentro de querer y poder, de soñar y demostrar que se quiere la Copa Mundo.

 

Los Diablos Rojos pelearon hasta el final y ya están en  cuartos de final del Mundial, y se medirán con Brasil. El elenco asiático sorprendió a todos al ponerse 2-0 con goles de Genki Haraguchi y Takashi Inui. Pero el defensor Jan Vertonghen aprovechó una serie de errores de la defensa japonesa para marcar un insólito gol de cabeza a los 69 y volver  a poner al elenco europeo en el partido.

Marouane Fellaini igualó para Bélgica a los 74 minutos, poco después de que el entrenador Roberto Martínez lo hiciera ingresar en lugar de Dries Mertens. Y a los 94 minutos, Bélgica se quedó con la victoria con un contraataque letal que comenzó en las manos del arquero Thibaut Courtois, pasó por Kevin De Bruyne y terminó cuando Romelu Lukaku dejó pasar el balón entre sus piernas para que Nacer Chadli definiera de cara al arco. Ahora, Bélgica se medirá con Brasil, que más temprano el lunes le ganó 2-0 a México. Japón daba la estocada. Takashi Unai puso a prueba a Tobi Andereweireld cuando la intensidad de Bélgica bajó, poco antes del descanso. Un tiro de Yuto Nagatomo, aparentemente inofensivo, sobresaltó a Roberto Martínez. Se le escapó bajo las piernas a Thiboaut Courtois, que reaccionó a tiempo. Los nipones eran incontenibles y daban la campanada.

Romelu Lukaku, estuvo cerca de marcar al rematar de cabeza un centro de Hazard a la hora de juego,justo antes de que Martínez pretendiera un golpe de timón con un doble cambio. Marouiane Fellaini y Nacer Chadli sustituyeron a la vez a Dries Mertens y Yannick Ferreira Carrasco. Antes de que diera tiempo a plasmarse sobre el campo Bélgica acortó distancias en una jugada que delató las carencias niponas. Una mala salida de Kawashima, un despeje al tuntún y un centro de cabeza de Vertonghen que se cuela en la portería. El gol espoleó definitivamente a Bélgica, que con poco estaba de vuelta al partido. Hazard apareció. Asumió el reto. Puso el balón en la cabeza de Fellaini, que empató a falta de un cuarto de hora del cierre. Elji Kawashima evitó que Bélgica lograra la remontada con tres intervenciones salvadoras pero no la del final. Un contraataque de manual que echó por tierra las esperanzas niponas y llevó a Bélgica con Brasil en cuartos de final.

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