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Athletic Bilbao y Real Sociedad dijeron en conjunto que quieren que la aplazada final del fútbol español se juegue cuando el coronavirus ya no sea una amenaza, para que pueda disputarse con espectadores.
La Copa del Rey entre los dos prestigiosos clubes vascos debía celebrarse el 18 de abril en Sevilla, pero fue postergada indefinidamente, al igual que el resto del fútbol local, por la epidemia de la enfermedad COVID-19. La Liga pretende reiniciar la competición en junio a puerta cerrada, y no se prevé que los aficionados vuelvan a los estadios hasta 2021.
Sin embargo, los finalistas de la Copa no quieren que el partido tenga lugar en un estadio vacío y están dispuestos a esperar el tiempo que sea necesario para asegurar que sus aficionados puedan disfrutar del encuentro. «Los presidentes de Real Sociedad y Athletic Club (…) tras reunirse con el presidente de la Real Federación Española de Fútbol, han acordado solicitar a la RFEF que la Final de Copa se pueda celebrar con público y de manera oficial, a puerta abierta, en una próxima fecha a determinar de acuerdo entre las tres partes», dijeron los clubes.
«El deseo y la voluntad de ambos clubes siempre ha sido, ahora y antes, jugar la final con la presencia de nuestros aficionados y aficionadas. Es lo que más nos gustaría». Más de 25.000 personas han fallecido por el nuevo coronavirus en España, aunque la tasa de infección diaria y el número de muertes han disminuido significativamente como resultado de uno de los confinamientos más estrictos de Europa. La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ha dado el visto bueno a la petición de los clubes Athletic Bilbao y Real Sociedad para jugar su aplazada final de la Copa del Rey con público cuando el coronavirus ya no sea una amenaza.
