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Con la baja del goleador Luis Suárez contagiado de COVID-19, Uruguay recibirá este martes a  Brasil, líder de las eliminatorias suramericanas para el Mundial de Qatar 2022, en busca de mantener la senda ganadora. La 4a fecha  hoy con: Perú -Argentina,  Ecuador-Colombia, Paraguay Bolivia y Venezuela-Chile.

 

 

Después de ganar sus tres partidos, Brasil tiene 9 puntos, mientras que Uruguay se ubica cuarto con 6 unidades gracias a dos victorias. Pero la selección «celeste» llega fortalecida tras el resonante triunfo del viernes pasado en Barranquilla 3-0 sobre Colombia. El equipo dirigido por el entrenador Oscar Tabárez, sin embargo, sufrió dos malas noticias para el partido en el estadio Centenario: el defensor Matías Viña, titular en el partido pasado, fue diagnosticado con COVID-19 a su llegada a Montevideo, por lo que el jugador de Palmeiras no podrá jugar.

En igual situación está el centrodelantero Suárez, del Atlético de Madrid, informó más tarde la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF), que agregó que también dio positivo el arquero suplente Rodrigo Muñoz. Todos se encuentran en buen estado de salud. Estas bajas se suman a las anteriores de los mediocampistas Giorgian de Arrascaeta (Flamengo) y Federico Valverde (Real Madrid) y los delanteros Maximiliano Gómez (Valencia) y Cristian Stuani (Girona), todos por lesión. En el entrenamiento del domingo, Tabárez -quien nunca pudo derrotar a Brasil como seleccionador celeste- ensayó el equipo titular con la única variante del juvenil Agustín Oliveros, de Nacional de Montevideo, en lugar de Viña. No se informó quién reemplazará a Suárez.

 

 

Brasil también llegará con bajas a Montevideo. Los delanteros Neymar (Paris Saint Germain) y Coutinho (Barcelona), quedaron fuera de la convocatoria por lesión, mientras que los mediocampistas Casemiro (Real Madrid) y Fabinho (Liverpool) fueron diagnosticados con COVID-19, al igual que otros tres futbolistas. El partido se disputará a las 20.00 hora de Uruguay (2300 GMT) y tendrá como árbitro al chileno Roberto Tobar. El último antecedente por esta competencia en Montevideo fue una goleada favorable a Brasil por 4-1 en marzo de 2017.

 

Ausencia en Atlético -Barça

 

 

Luis Suárez no podrá reencontrarse con el Barcelona sobre el césped tres meses después de haber salido del conjunto azulgrana rumbo al Atlético de Madrid. El Covid19 lo sacó del cotejo previsto para el próximo sábado. El contagio conocido este lunes y que involucra también al portero Rodrigo Muñoz y al jefe de prensa de la ‘Celeste’, Matías Faral. Asíl as cosas se frustra uno de los reencuentros más esperados de esta temporada de LaLiga Santander: Luis Suárez frente al Barcelona y Lionel Messi.

El delantero charrúa iba a ser el objeto de todas las miradas el próximo sábado 21 a las 21.00 horas en el estadio Wanda Metropolitano: su saludo con su excompañero y amigo Messi, con el que compartió delantera durante seis temporadas y ganó 13 títulos, iba a ser la foto más buscada. Nada de esto se podrá resolver dentro de cinco días, porque la cuarentena que tendrá que asumir Luis Suárez echa por tierra su presencia de rojiblanco ante el equipo del que es su tercer máximo goleador histórico, con 198 tantos en 283 partidos oficiales, y que ha aportado trece títulos a su palmarés: una Liga de Campeones, un Mundial de Clubes, una Supercopa de Europa, cuatro Ligas, cuatro Copas del Rey y dos Supercopas de España.

 

 

Un club azulgrana en el que lo ganó todo, pero del que según reconoció Suárez esta semana venía motivado y goleador, que acumula 5 goles y 1 asistencia en 9 encuentros oficiales, y que ha marcado en sus últimos tres duelos ligueros, ante el Celta (0-2), el Betis (2-0) y el Cádiz (4-0). Su ausencia no solo priva al Atlético-Barcelona de su duelo más destacado de forma indiscutible, sino que trastoca en buena medida los planes del entrenador argentino Diego Simeone que reconoció en las últimas semanas que ha modulado el sistema de juego del equipo a raíz de la llegada del punta de Salto (Uruguay).

«La presencia de Suárez nos genera una necesidad de abastecerlo, Costa tiene otras características, Morata tenía otras (…) Luis necesita tener gente más cerca de él, vivir donde sabe que va a hacer daño (…) Claramente las características de Suárez nos genera tener esta inquietud para potenciar su situación de juego», explicó hace 14 días en Moscú antes de enfrentarse al Lokomotiv (1-1). Esa evolución del modelo de juego no solo ha beneficiado a Suárez, sino que ha repercutido positivamente en su compañero portugués Joao Félix, que acumula siete en diez partidos, casi los mismos que en toda la temporada pasada (nueve) y se ha visto beneficiado de la capacidad asociativa del charrúa.

 

El rompecabezas de Simeone

 

 

Sin Suárez, el plan del Atlético para afrontar la visita del Barcelona tendrá que cambiar. Y su principal sustituto, Diego Costa, es una incógnita: lleva un mes fuera y seis partidos de baja por una lesión muscular en el muslo izquierdo, todo anticipaba que pudiera recuperarse en estos días, pero aún no se ha entrenado al mismo ritmo que sus compañeros. Aunque llegara el delantero de Lagarto (Brasil), el Atlético tiene con él un delantero diferente: menos asociativo y más orientado a buscar el balón al espacio, aunque no goce de la velocidad y potencia que paseaba por los campos españoles y europeos en su anterior etapa como rojiblanco.

Si Costa no llega a tiempo, el abanico de las opciones se abre: Marcos Llorente como falso ariete fue la opción que desplegó Simeone en el único partido en el que no contó con ninguno de sus nueves titulares, ante Osasuna (1-3). El argentino Ángel Correa podría ser otra opción, aunque el técnico lo prefiere entrando por la derecha. Un rompecabezas que tendrá que armar Simeone en función de si la recuperación de Diego Costa avanza, y que apunta a complicarse más si se confirma la lesión muscular que sufrió con su selección el mexicano Héctor Herrera, indiscutible en los últimos seis encuentros en el eje del centro del campo.

Muchas dudas para un Atlético que llega como único equipo invicto de LaLiga Santander y en mejor momento teórico ante uno de sus peores rivales, un Barcelona al Simeone que nunca ha ganado en competición liguera. Y una sola certeza: Luis Suárez no estará en el césped ante su exequipo. La pandemia de coronavirus obliga a aplazar el reencuentro más esperado.

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